Estamos ante un juego muy jugable y muy divertido, pero tambien altamente dificil. El aumento de tamaño del personaje en el salto, y las facciones de la cara, hacen que gráficamente sea muy atractivo, aunque este atractivo sea menor en la versión Amstrad debido a los cuatro colores.
En conclusión, uno de los mejores juegos españoles que he visto para los 8 bits. |